columna joseluisQué bueno que los productores agrícolas, particularmente los graneros de Sinaloa y Sonora (maíz y trigo), se hayan agrupado en un frente nacional para darle mayor fuerza a su demanda (7 mil pesos por tonelada de maíz y 8 mil pesos la tonelada de trigo), soportando dicho frente nacional de productores, en una demanda inmediata como son los precios de grano, pero también en la firma del acuerdo nacional, el cual demanda un programa nacional que rescate a los productores agrícolas del país, cada vez más desprotegidos de sus competidores en el TMEC, Estados Unidos y Canadá.

 

Es la excelente noticia que después de más de una década, surja un embrión de organización campesina nacional con esa intención de ir por el rescate del campo mexicano, lo que resulta más valioso sin duda del encuentro de los productores que ha provocado el desdén del gobierno de López Obrador a sus cosechas de este año.

 

Por eso que bueno que la moneda trajo ese sello, pero que malo, que, a punto de sacar todos los granos del campo de cultivo, ni siquiera le signifique una molestia al presidente de la república para que les dedique algunos minutos que lo distraigan de sus peroratas mañaneras.

 

No, tres días llevan los líderes de productores a las puertas de palacio nacional sin escucharlo y menos recibirlos, el secretario de gobernación, el que se había declarado muy ducho para resolver el problema, resulto un perfecto ignorante de la dinámica de mercados de granos, de la estacionalidad de las cosechas con todas sus implicaciones, la lógica del financiamiento de la siembra y la preparación del próximo ciclo agrícola, por lo que no atina a indicarle al presidente que medida asumir y resulta un incompetente para resolver el problema.

 

¿que no sabrá que esta inundado el mercado nacional de maíz? ¿que están abiertas las fronteras?¿que cualquiera puede importar? Y ¿y que la importación es libre?.

 

Pues pareciera que no y quizá están pensando que los precios internacionales repuntan, pero sigue sucediendo lo contrario y el tiempo pasa y pasa, lo que eleva los riesgos y la incertidumbre.

 

Ojalá y el gobierno del estado y el gobierno federal, rectifiquen y que el apoyo que promueven para los productores más precarios, mejor se convierta en un subsidio de 1500 pesos por tonelada por que así saldrá más barato.

 

Que no pretendan regular el mercado, eso ya fracaso desde principio de año con el maíz (7 millones de toneladas) que entro al país, si creen que lo van a lograr están muy equivocados y el gobierno de Sinaloa sufrirá grandes pérdidas.

 

Vale más dedicar 700 millones de pesos en subsidios para los productores precarios que compran las 500 mil toneladas en 3500 millones, con ese esquema pueden perder hasta mil millones de pesos y endeudar más al gobierno estatal y que se afecte al 40% de las participaciones federales para el estado y los municipios, puede resultar una quiebra en cadena.