Para el Dr. Francisco Javier Merino Ramírez nuestro sentido pésame por la pérdida de su Sra. madre Delia Ramírez y a toda la familia merino garnica un solidario abrazo. D.E.P.

Que lejos está el presidente López Obrador de ser un estadista, tan lejos que ni siquiera le llega a su antecesor Enrique Peña Nieta, quien fue capaz de construir acuerdos políticos y llevar a cabo nueve reformas estructurales que transformaron el escenario socioeconómico del país, al grado de provocar cambios que transformaron la economía de México y sus habitantes.

Ha presentado a la cámara de diputados veinte paquetes de reformas que se pretenden discutir en los próximos cien días, como si fuera un legajo de cuentas y chistes de mal gusto, que forzosamente pretende se aprueben.

Vaya, ni tan siquiera al seno de MORENA, su partido, ni su candidata presidencial, Claudia Sheinbaum lo comparten, pues se trata simplemente de un esperpento legislativo para alborotar el avispero electoral y pretender engañar a los detractores una vez más, como si no hubiera sido suficiente con los más de 130 mil mentiras que ha dicho en las mañaneras.

Simplemente piensa que todos los mexicanos somos bobos y que nos va a engatusar con su predica de que busca transformar el país, que va a crear una nueva constitución y que el país alcanzara el paraíso con sus fantasías.

Peña Nieto fracaso por que fue el presidente de la frivolidad y la corrupción que quizá no supo la dimensión de lo que hacía con sus reformas, cuando tan solo con quitarle la preponderancia a Telmex con la reforma al artículo 27 constitucional, le quitaba de un golpe 5mil millones de dólares anuales a Carlos Slim, tan solo porque el, a su arbitrio fijaba las tarifas telefónicas, que aunado a las pérdidas del monopolio del mercado telefónico, ya sabrá usted porque Slim dejo de ser el hombre más rico del mundo.

O el caso de la reforma educativa que le quito al SNTE el monopolio de las plazas magisteriales y 130 mil aviadores que tenía el Sindicato como fuerza de choque, junto con la CNTE.

Por eso la rabia de AMLO contra los organismos autónomos como los reguladores del mercado telefónico, eléctrico y de televisión, que por cierto este último entro a la era de la digitalización, el fin de los aparatos analógicos y el arribo abierto del internet, solo por mencionar tres aspectos vitales.

Ahora no se diga las reformas de PEMEX y CFE, que les quitaron la calidad de “empresa productiva del estado” para lanzarlas al mercado libre, a la competencia con otras empresas y a buscar nuevas alianzas para potenciarlas con sus ventajas comparativas con empresas trasnacionales.

La reforma de AMLO son cuetes lanzados a las brasas para armar ruido electoral, pero no existe sustancia real de transformación. Por poner tan solo un ejemplo, crear un sistema de salud moderno y eficaz fusionando al IMSS y el ISSSTE. ¿cuándo lo van a hacer? ¿porque lo destruyeron más de lo que ya estaba? O ¿para qué fusionar a la guardia nacional con el ejercito? Y en el caso de las pensiones ¿de dónde van a sacar dinero?

No, si para mentir son unos magos, como máxima que ya casi ni mencionan por que se acabó, “no mentir, no robar, no traicionar” ... que en su casa se lo crean.