El consumo de 100 mililitros diarios de vino tino, después de la comida, puede representar múltiples beneficios en el organismo, los cuales se ven reflejados en el retardo del envejecimiento, en la disminución de peso, prevención de algunos tipos de cáncer, reducción de colesterol malo, de triglicéridos, entre otros, enfatizó Rosa Aida Martínez Bustillos
La especialista de la Facultad de Ciencias de la Nutrición y Gastronomía de la Universidad Autónoma de Sinaloa (UAS) señaló que de acuerdo a estudios recientes existen evidencias sólidas sobre las propiedades nutrimentales y los beneficios a la salud a partir del consumo “moderado” de vino tinto.
Puntualizó que los antioxidantes más importantes del vino tinto son los flavonoides, sustancia que es cardioprotector al reducir la coagulación de la sangre y la inflamación celular, por lo que incluir pequeñas cantidades de vino tinto (100 ml por día) dentro de una dieta saludable puede reducir el riesgo cardio y cerebrovascular, pues favorece el aumento de colesterol bueno y reduce significativamente el colesterol malo, aunque aclaró que una mayor ingesta resulta contraproducente pues podría aumentar el riesgo de enfermedad cardiaca.
“El vino tinto se caracteriza por ser rico en ácidos fenólicos y polifenoles, poderosos antioxidantes que se encuentran en altas concentraciones en la piel de la uva y las semillas y se liberan en el proceso de fermentación. Estas sustancias combaten a los radicales libres. Es la forma en la que el organismo protege a las células del desgaste diario, así como de numerosas enfermedades”, contextualizó.
La ingeniera bioquímica de la Casa de Estudios sinaloense apuntó también que a diferencia de lo que se cree, el vino tinto es una buena opción de bebida alcohólica cuando se quiere cuidar la línea, ya que una copa de este contiene baja cantidad de kilocalorías y dependiendo del grado de alcohol puede tener entre 5 y 8 gramos de hidratos de carbono.
Aun y cuando tiene beneficios el beber vino tinto, Martínez Bustillos fue clara en decir que esto debe ser moderado y recalcó que beber en exceso es uno de los principales factores de riesgo de muerte prematura y discapacidad.