columna oswaldo villaseñor¿Huele a corrupción o huele a política?

“La tolerancia llegará a tal nivel que las personas inteligentes tendrán prohibido pensar para no ofender a los imbéciles”. Frase de Fiódor Dostoyeski.

Ayer un abogado me hizo una apuesta. “Le apuesto una cena a que van a vincular a proceso al ex alcalde de Culiacán Jesús Estrada Ferreiro”. Mi respuesta fue simple. “No te puedo apostar porque pienso lo mismo”.

Este caso y otros más que ahí vienen volando, huelen a política, más que a corrupción. ¿Y hay corrupción? Eso es lo de menos.

Mi dicho de cabecera, es que en este país, no se castiga a los corruptos, sino solo se castiga a los desalineados.

Jesús Estrada Ferreiro, El Químico Benítez y otros más que pueden sumarse a la lista, no serían procesados por picaros, porque sean corruptos, sino son o serían procesados por “desalineados”. Eso no se perdona en la era de la 4T y en ninguna parte de la historia.

La razón esgrimida para vincular a proceso a Jesús Estrada está de risa. “No licitó la renta y contratación de los 40 camiones recolectores de basura” –lo cual desde luego es ilegal en algunos supuestos- y luego viene una suposición. “Se pudieron rentar más baratos”.

Si esta razón es suficiente para abrir un proceso penal, ya se le tendría que abrir proceso a todos los alcaldes de Sinaloa, a funcionarios del propio Gobierno del Estado y a casi todo el Gobierno Federal, empezando por Andrés Manuel.

La propia Auditoría Superior de la Federación ha determinado en sus informes que más del 80 % de las obras o contratos firmados por el Gobierno Federal, se hacen por asignación directa. No se licitan.

De acuerdo a la página de Compranet, -antes de que la tumbaran- el Gobierno del Estado tenía solo 7 licitaciones públicas y cientos de asignaciones directas. Los 18 alcaldes estarían todos sentados ya en el banquillo de los acusados.

¿Qué la ley tiene sus excepciones para no licitar? Efectivamente sí las tiene. Sería interesante ver quien las incumple y quién no.

Pero insisto, en este país, la ley solo se aplica a los desalineados, no a los corruptos.

Y es a partir de los “desalineados”, -ojo no de los corruptos, eso le compete a un juez determinarlo-, que vale la pena observar el escenario político, no el del combate a la corrupción, pero sí el de la política y la lucha por el 24, que es lo que mueve los escenarios.

1.-Ayer en su conferencia “Semanera” el gober Rocha –quien ya casi se gana el título completo de Gobernador- por la forma como viene movimiento los hilos de poder y como empieza ahora sí a agarrarlos todos, lanzó una casi sentencia sobre El Químico Benítez. “Una más y se va”.

Eso sí, también dijo que el pueblo de Mazatlán es sabio y sabe a quién le pone el dedo. “Algo se tiene que hacer allá”, sentenció.

¿Y que es ese algo?. Pues darle para adelante al desafuero y destitución del alcalde de Mazatlán. Como que El Químico, ahora si ya tiene los días contados.

El proceso penal y de juicio político ya lo tiene listo. El Congreso solo espera que baje la orden del Tercer Piso.

2.-El otro caso, es el ventilado ayer durante una audiencia que duró más de 18 horas y en la cual el Juez de control vinculó a proceso a Jesús Estrada Ferreiro. No se pidió prisión preventiva y el ex alcalde podrá seguir su proceso en libertad.

El destino del ex alcalde era predecible en ambos sentidos.

Si se atendía la ley y el derecho, lo más probable era que no se le vinculara a proceso. Si se atendía la política, hiciera lo que hiciera, se defendiera como se defendiera el ex alcalde, sería vinculado de todas maneras.

Algo así sucedió.

3.-Pero hay otro caso que poco ha despertado los reflectores. El del diputado federal Billy Chapman. El ex alcalde de Ahome, cree que dejó un capital político que le alcanza para buscar ser candidato al Senado en el 2024 y de paso imponer como candidata a la alcaldía a su ex tesorera y ahora compañera diputada, Ana Ayala. En Sinaloa ya empezaron a despertarlo de su sueño.

De entrada el Congreso Local le reprobó sus cuentas públicas. La revivió un caso que el solo confesó de manera pública. Sus funcionarios que tenía en JAPAMA lo traicionaron y defraudaron a la paramunicipal con 92 millones de pesos. Eso lo dijo él.

Hoy el Congreso da a conocer una pista. Encontraron un mundo de facturas falsas en la JAMAPA. ¿Serían con las que comprobaron y trataron de tapar el desfalco de los 92 millones de pesos?

Hoy Billy Chapman y Ana Ayala, si soñaron que tenían futuro en Sinaloa y en Ahome, a lo mejor ya deben estar despertando de su sueño, sabedores de que tendrán muchas cuentas por aclarar. ¿A poco no?

Aquí el gran ganador es Gerardo Vargas. Le limpia el Congreso su camino para que no tenga sombras en Ahome para una posible reelección.

4.-El caso de las Guacamayas que ayer explotó en Sinaloa dónde el Ejército en sus informes dice que el ex alcalde de San Ignacio, Iván Báez es un supuesto cabecilla del cartel de Sinaloa, le dio una oportunidad de oro a Rocha que quizás no buscó.

Su Secretario de Agricultura, Jaime Montes quien se la jugó con El Químico Benítez en la interna por la Gubernatura y hombre cercano al Presidente Andrés Manuel, se sentó con Iván Báez y una foto juntos a la mesa y otras cabalgando, corrieron como reguero de pólvora el día de ayer.

Rocha ya mandó un mensaje. “Yo no lo mande, si hasta me desairó”. Ufff.

Montes es otra figura de Morena que también hablaba con el Presidente y este lo escuchaba. De entrada Rocha ya como gobernador le quitó la Superdelegación, que era el puente de comunicación con el Presidente.

Hoy pudiera ser un nuevo sacrificado en el Gobierno Rochista.

5.-¿Qué tienen en común estos 4 personajes Morenistas?. Los cuatro –sin contar a Cuen- podrían aspirar a ser candidatos al Senado, son gentes que tienen o tuvieron comunicación directa con el Presidente, serían figuras externas, -no del grupo del Gobernador- que jugarían un papel importante en el 2024.

Todos, están en la picota de la implacable aplicación de la ley. ¿Hay política o no hay política?

6.-Lo que sí, es que el Gobernador Rocha, el mismo que llegó con un control institucional de todo el Gobierno, pero con todos los hilos de la política sueltos, hoy pareciera agarrarlos todos y quedar como el único depositario de poder en Sinaloa, pero además, como la única figura obligada con quien pisar base para quien resulte ser candidato a la Presidencia de la república.

¿A poco no?

Habrá que estar pendientes.

PASO A PASITO.-Tal pareciera que el espionaje del Ejército era selectivo. Primero aparecen 21 objetivos de alto riesgo para el Presidente Andrés Manuel López Obrador. En estos aparecen carteles del narco pequeños que operan en algunos regiones del centro del país y guerrero. Ninguno de los grandes.

Por ejemplo el cartel de Sinaloa ni el Jalisco Nueva Generación, significan peligro para el Gobierno de Andrés Manuel.

Hoy las Guacamayas difunden que el Ejército reportó cuando menos 14 candidatos que jugaron en el 2021 ligados al Narco. Eso sí, casualmente esos candidatos son ligados a esos mismos carteles que sí espía el Ejército. Fuera de esos, no hay nada por lo pronto.

OTRO PASITO.-Que el Gobierno de Andrés Manuel y la SEDENA pagaron 60 millones de pesos por al software espía Pegasus en el 2019, el primer año del presidente.

Pues que no dijeron que ya no iban a espiar y hasta un mega escándalo hicieron con el cambio de nombre del CISEN.

Hoy los Guacamayas los exhiben con los pagos y la compra del Pegasus. Los otros datos, le siguen pegando al Gobierno Federal.

UN PASITO MAS.-Lo que faltaba. La Unidad de Inteligencia Financiera investigó –según expedientes de las Guacamayas Leaks- a altos mandos militares por lavado de dinero. Los verde olivo habían lavado 239 millones de pesos de dinero de procedencia ilícita.

Y lo que falta por saberse.