columna oswaldo villaseñor

En nuestra columna de ayer, adelantamos lo siguiente. ¿Y por qué pensar que la bandera del combate a la corrupción será de nuevo el estandarte de Morena para mantener adeptos en el 2021? Muy sencillo.

Por qué de entrada ya mandan las primeras señales de la gran preocupación que este tema les causa. Por un lado le urge adueñarse de esta narrativa que les sirva en lo político, pero también, en primerísimo término, por qué ya buscan como protegerse ante la posibilidad de perder el poder del Congreso y enfrentar procesos penales a partir de que terminen sus propios periodos.

Y donde empieza esta preocupación. En los tiempos que se vienen a partir de una fecha clave. El arranque de la guerra por la sucesión que históricamente inicia a partir de la rendición del penúltimo informe del Gobernador y ésta fecha también se cumplió.

¿Hay una real preocupación en los diputados de Morena y en general en este partido por adueñarse de la bandera del combate a la corrupción?

Tal parece que sí y motivos deben de tener de sobra.

Pero vayamos por partes para entender la guerra que viene.

1.-El pasado 31 de octubre el Congreso y en sí la Comisión de Fiscalización que meses atrás intentó adueñarse de las funciones y facultades propias de la Auditoría Superior del Estado y ser ésta quien calificara las Cuentas Públicas tal y como lo hizo al rechazarlas todas, menos la del Gobierno del Estado, debería de presentar la declaratoria de Conclusión y Fiscalización de la cuenta pública y no lo hizo en acato a un mandamiento de la Corte. ¿Realmente fue por eso? Ahí la dejamos.

2.-Pero la preocupación de los diputados de Morena debe ser mucho mayor porque la sucesión también a ellos los ha alcanzado y de paso los exhibe.

El pasado 10 de Noviembre del presente año, en el Congreso se dio un fuerte debate y duelo de señalamientos entre diputados que en el pasado fueron aliados y que hoy la sucesión los ha enfrentado y confrontado.

¿La causa? Remover al diputado Fernando Mascareño de la presidencia de la Comisión de Protocolo y Régimen Parlamentario y su sustitución por el diputado Marco Cesar Almaral.

3.-El diputado Mario Rafael González acusó a su líder Graciela Domínguez de ejercer un régimen autoritario al interior el Congreso al ordenar la sustitución de Fernando Mascareño por negarse a acatar ciegamente sus ordenamientos.

Y de paso acusó. Ellos- Morena- quieren tener el control de esta importante comisión para subir o bajar las iniciativas que a ellos les convenga.

Graciela Domínguez no se quedó callada y recomendó a su compañero diputado Mario Rafael González dejar de culparla de todo.

4.-Lo cierto es que detrás de este agarrón protagonizado el pasado 10 de Noviembre, hay todo un contexto. La lucha por la sucesión y la lucha por la candidatura por la gubernatura, está presente.

Fernando Mascareño y Mario Rafael González son diputados, uno de Morena y otro del PT que abiertamente trabajan por el proyecto de Luis Guillermo Benítez, mientras que Graciela Domínguez es un alfil de primer orden en el proyecto del Senador Rubén Rocha.

El choque de trenes, los exhibe y les causa preocupación a quienes actualmente tienen el control más que nada administrativo del Congreso, o sea quienes manejan el dinero público a su antojo. ¿Y si pierden el poder qué?

5.-Este choque de trenes ya tuvo en el pasado reciente una exhibición de mayor alcance. Justo un año antes, el 07 de Noviembre pero del 2019, 14 diputados –todos de Morena o partidos aliados- le dieron un golpe de estado a Graciela Domínguez y la desconocieron como su Coordinadora y presidenta de la Junta de Coordinación Política.

Acusaron entre otras cosas, mal manejo de los recursos públicos.

Finalmente hubo negociaciones y entre otras cosas, regresaron las compensaciones a los diputados y Graciela Domínguez permaneció en su cargo pero se la acotó su gran poder que ejercía.

6.-¿Pero por qué hay tanta preocupación por apropiarse de la narrativa del combate a la corrupción en la fracción de Morena? Muy sencillo.

El próximo año, o sea el 2021, justo el año de la elección, se conocerán a detalle las auditorías y las cuentas públicas de los municipios que son gobernados por Morena y del mismo Congreso del Estado.

¿Hay seguridad de que Morena y el Grupo de Graciela Domínguez, conserve el control de los recursos del Congreso? Al día de hoy nada se tiene seguro. ¿Y si el candidato es El Químico Benítez o Morena pierde la elección del 2021?

Uff… entonces la preocupación sería mucho mayor. ¿A poco no?.

7.-A penas el 25 de julio del presente año, el diputado local priísta Sergio Jacobo cuestionó la opacidad y la falta de transparencia con la cual la fracción de Morena maneja los recursos públicos del Congreso.

Dijo que son muy buenos para señalar a los demás por corrupción o falta de transparencia, pero no se fijan en lo que ellos hacen. Acusó que las cuentas y las finanzas del Congreso se encuentran convertidas en una caja negra.

8.-Pero eso no es todo. Dos días después, o sea el 27 de julio del presente año, la organización ciudadana Vigilantes Ciudadanos que lidera Guillermo Padilla Montiel, así como medios de Comunicación, retomaron una investigación sobre el uso correcto de los recursos públicos que se gasta el Congreso Local.

Dicha investigación que se hizo del periodo comprendido del día 01 de Octubre del 2018 al 31 de dic del 2019 arrojó una serie de irregularidades y falta de transparencia en el gasto de los recursos asignados por diferentes partidas a los diputados.

Tan solo en la partida de Fortalecimiento para Actividades Parlamentarias –se le da una cuota mensual de 12 mil pesos por diputado a cada Fracción o Grupo- es precisamente la Fracción de Morena la que menos había comprobado dichos gastos.

Tan solo en ese periodo -5 trimestres- la Fracción de Morena recibió 4 millones 115 mil, 572 pesos de los cuales a esa fecha –julio de 2020- solo había transparentado el gasto de 219 mil 426 pesos.

Es decir, nadie sabe, nadie supo, en que se gastaron 3 millones 896 mil 146 pesos.

El resto de las fracciones no hacen mal los quesos pero las cantidades sin comprobar son menores.

¿Cuándo aparecerá con mayor detalle este tipo de irregularidades y otras más que pudieran existir en el manejo del dinero público?. Bingo.

Justo el próximo año, cuando se juegue la sucesión y se elija un nuevo Congreso y un nuevo Gobernador. En 2021 se conocerán las cuentas públicas del 2019 del Congreso y del primer año completo de la actual legislatura. ¿Hay motivos para preocuparse y adueñarse de la narrativa del combate a la corrupción?. Parece que sí. ¿Y si pierde Morena la elección o el candidato es El Químico? Uff.

9.-En fin, la guerra que viene apenas empieza y las señales que muestran la preocupación por quedar atrapado en medio de la lucha por el combate a la corrupción es real y sustentada. Nada está escrito aun.

Eso sí, el nerviosismo no es para menos. La libertad de muchos personajes pudiera estar en juego, no solo la honra.

Habrá que estar pendientes.

PASO A PASITO.-No cabe duda que el inicio del juego de la sucesión y los reacomodos naturales que esta trae consigo, provocan un mar de especulaciones.

Ayer “la sorpresiva” renuncia de Guadalupe Robles al cargo de Coordinador de Asesores del Gobernador Quirino Ordaz provocó un mundo de especulaciones.

La verdad es que la renuncia de Guadalupe Robles no debería de sorprender. Es un acto de congruencia.

Guadalupe Robles es una gente cercana y amigo personal de Sergio Torres quien tiene todo el derecho del mundo de seguir a su amigo en su proyecto por la gubernatura.

Lo sorpresivo fuera que se quedara y no siguiera a su amigo, como si lo han hecho otros cuadros identificados con Sergio y que decidieron permanecer en el actual gobierno.

Los reacomodos son normales y lo que habrá que evaluar y observar es el corte de caja final. Ahí estará el detalle.

OTRO PASITO.-El fin de semana pasado el empresario Leovigildo Carranza festejó un año más de vida. Lo hizo rodeado de sus amigos más cercanos entre ellos el gobernador Quirino Ordaz.

Pero entre chorcha y chorcha hay un tema que no puede escapar al día de hoy.

Los empresarios ahí presentes, según se dice, le hicieron una sola petición al Gobernador. Que se fije bien a quien postula como su candidato a la alcaldía de Mazatlán.

Le dijeron que Mazatlán ya se merecía tener un alcalde que sea ejecutivo y con suficiente visión para impulsar aún más a este puerto.

Pero la petición, según se dice, no paró ahí. Se atrevieron a proponerle nombres de personajes a quienes verían bien como alcalde.

¿Cuáles fueron estos nombres o cual fue el nombre puesto en la mesa? Fue uno solo. El de Samuel Lizárraga.

Dicen que el Gobernador no dijo que sí, pero tampoco que no. Solo que aún no era tiempo para tomar la decisión.

Habrá que esperar.