El presidente López Obrador dio un informe de los primeros 100 días de Gobierno. Desde luego, parecía su primer informe anual, el que por ley debe de presentar ante el Congreso de la Unión y ante el pueblo de México.

23 Gobernadores de los Estados, entre ellos el de Sinaloa, Quirino Ordaz, se hicieron presentes al evento del Presidente, así como personajes de la política, la milicia y del mundo empresarial.

Desde luego, como en todo y como siempre sucede, el Presidente da un informe de lo que a su juicio se ha hecho bien y está marcando un cambio o una transformación en el país.

Sin embargo, hoy como nunca, el otro informe, el que no va con lo dicho por el Presidente, o sea, el que la oposición destaca y pondera, también se hizo presente. En este otro informe, se destaca lo que a juicio de la oposición se ha mal en el nuevo gobierno.

Desde luego, ambos informes son válidos y contiene información real y creíble. Ni todo está bien, ni todo está mal. Un gobierno tiene aciertos y tiene errores o malas decisiones, como se quiera ver.

Pero lo que también es cierto, es que hoy como nunca, las visiones sobre un mismo México y sobre un mismo gobierno, se encuentran polarizadas.

Los que ven todo bien a favor de Andrés Manuel, como la dirigente nacional de Morena, Yeidckol Polevsky quien afirma no ver ningún solo error en lo que va del nuevo gobierno, o quienes también con justa razón critican las decisiones del nuevo Gobierno que afecta a tal o cual sector, como ocurre con el agrícola de Sinaloa.

Mientras en el sur del país aplauden el cambio de criterios para la entrega de los apoyos al campo, en el norte y sobre todo en Sinaloa, esa misma política mantiene a los productores en las carreteras.

En fin, los dos informes, el de AMLO que habla y pondera como un gran logro de justicia social la entrega de apoyos directos a casi 11 millones de personas para evitar supuestamente la corrupción y el uso de estos programas con fines políticos, como el otro informe, el de los afectados con el retiro de apoyos a madres con hijos en estancias infantiles, o a las mujeres víctimas de la violencia o a los agricultores que realizan una agricultura comercial, son válidos y reales. A ninguno la falta razón ni veracidad.

En pocas palabras, a unos les da y a otros les quita. Dependiendo la circunstancia, es la opinión que se tiene sobre el nuevo gobierno.

Eso sí, AMLO rindió su informe de los 100 días, hasta con las casas encuestadoras y las mismas encuestas también polarizadas.

Las que hablan de una fuerte popularidad que lo ubica en el 78 por ciento de aprobación, como los que pintan ya el inicio de su caída por tener antes el 86 por ciento y ahora solo el 79 por ciento de aprobación.

Pero además, de los análisis que pintan a un nuevo Gobierno sólido en materia económica y quienes vaticinan desde este momento fuertes conflictos económicos y sociales que afectará al país y a los mexicanos. Ahí también la polarización se hace presente.

En fin, dos México y una sola realidad. Un país polarizado entre lo bueno, que en realidad es bueno y lo malo que en realidad es malo.

¿Cuál de las dos realidades, muy reales, irá a pesar más?.

Bueno, eso es lo que está por verse.

Así sin quitarle ni ponerle

Habrá que estar pendientes.

 

PASO A PASITO.-Pero ya que andamos con realidades reales, no virtuales, hay otra que también ya polariza y divide a los mismos Morenistas o izquierdistas. Llama la atención el duro mensaje que le envió Ricardo Armenta, líder agrícola surgido en la izquierda y seguidor de AMLO desde el PRD como contestación a lo dicho por la diputada Graciela Domínguez quien al parecer dijo que las organizaciones agrícolas habían avalado las políticas agropecuarias de Gobiernos Federales anteriores. O sea el mismo rollo de confrontación.

Ricardo Armenta le dice a la diputada que No se equivoque, y que al parecer ni informada ha estado de las movilizaciones recurrentes que año tras año realizaron.

Lo que pasa, dice Ricardo Armenta, es que todo parece que hoy los productores fueron engañados con promesas de campaña electoral que el Gobierno Federal ha olvidado de nuevo.

En fin.

 

OTRO PASITO MAS.-Tal parece que a Heriberto Galindo ya le gusto asumir el rol del “destapador” de candidatos al gobierno de Sinaloa.

Fue de los primeros en agenciarse la paternidad de la candidatura de Quirino Ordaz y fue el primero en anunciar en redes sociales el acuerdo al cual se había llegado con el CEN del PRI para que fuera Quirino el candidato.

Hoy cuando aún falta más de mitad del actual gobierno, Heriberto Galindo ya sacó su lista de Supremos aspirantes por el PRI.

Heriberto Galindo señala a Mario Zamora, Sergio Torres, Aarón Irizar, Jesús Valdez y Diva Hadamira Gastélum.

Desde luego a Heriberto le late por Mario Zamora, de quien es su suplente en el Senado. Tres años con beca no le caerían nada mal siempre y cuando el PRI retenga la Gubernatura.

Eso sí, Heriberto Galindo deja por fuera a otras figuras que seguramente también habrán de levantar la mano como Alvaro Ruelas, Gerardo Vargas, Rosa Elena Millán, más los tapados, entre otros.

Al día de hoy la lista es larga pero es muy prematuro y menos con un gobernador fuerte como lo es Quirino Ordaz.

 

UN PASITO MAS.-Por cierto al Gobernador de Sinaloa, Quirino Ordaz, sigue siendo bien evaluado en las mediciones nacionales que realizan diversas firmas.

México Elige, en su estudio coloca a Quirino Ordaz como el mejor Gobernador evaluado de México.

Otras firmas como Arías Consultores, ha venido colocando de manera constante a Quirino Ordaz entre los mejores evaluados del país.

Lo hemos dicho en otras ocasiones. Quirino le ha apostado a hacer un bueno gobierno con obra social, alejado de escándalos de corrupción, con buenos números en materia de seguridad, con un manejo responsable de las finanzas al no endeudar al Estado y fomentando las inversiones y por ende generar empleos y oportunidades.

Eso sí, no le ha apostado al control político y quizá eso le ha provocado muchos ruidos y jaloneos, pero con el tiempo se sabrá si esto fue bueno para él y eso se sabrá conforme se acerque su sucesión.

Ya veremos dijo el ciego.