columna miguel angel lopez circular

 

La reciente visita del presidente Andrés Manuel López Obrador a Sinaloa, dejó un sabor agridulce entre muchos de sus fieles seguidores que le dieron el voto, además sigue creciendo la inconformidad en su contra por parte de los sectores agrícolas, pesca, ganadería, salud y educación, debido a la desatención por parte del gobierno federal y más ahora con la propuesta del disminuido presupuesto de egresos para la entidad para el próximo año 2020.

 

Desde el pasado viernes que el mandatario llegó a Mazatlán, las cosas ya no fueron igual que antes, los contingentes de ciudadanos que se apersonaban a recibirlo han disminuido considerablemente y así como él lo está haciendo costumbre, mucha solicitud de temas locales y de poca trascendencia, entendiendo que esto es motivado por quienes se dicen sus compañeros en el estado.

 

En su trayecto rumbo a Guasave, tuvo que detenerse en la carretera, donde grupos de productores del campo se le atravesaron y fue el diputado del PRI, Faustino Hernández Álvarez, quien lo abordó personalmente para solicitarle que tome en cuenta a los productores y la agricultura en general, que se dote de recursos al campo y así también le hicieron otros reclamos, a lo cual, el ejecutivo federal intentó minimizar pero las protestas subieron de tono y eso lo hizo poner más atención, pero no hizo ningún compromiso público ni en corto con los productores del campo.

 

Durante la inauguración del estadio Francisco Carranza Limón de algodoneros de Guasave, López Obrador estuvo tranquilo en apariencia, se mantuvo un poco más “seco”, a pesar de que “le plancharon” el escenario, para evitar lo que ya le pasó en el estadio de los diablos rojos de México, por eso, en Guasave le llenaron el estadio de seguidores de él, de esos que tuvieron su día nacional en la inauguración del estadio que nunca imaginaron, para que el aplausometro sostuviera los decibles que AMLO desea en la alimentación del ego presidencial.

 

LA HISTORIA ES LA MISMA que se ha vivido con otros presidentes, las promesas de campaña se cumplen a medias pero, la promesa a los productores del maíz es muy significativa para la economía del estado, por eso crecen las molestias en contra del “peje”. Ahora vamos a esperar que logre cabildear el gobernador Quirino Ordaz Coppel con los diputados federales y con el secretario de hacienda federal en pro del presupuesto para la pesca, el campo, la ganadería, salud, educación y las universidades públicas.

 

NO ME QUIERO ADELANTAR pero, creo que algo se conseguirá, lo digo así porque Quirino Ordaz nos ha demostrado que sabe de números y que es buen cabildeador, espero que también los senadores hagan lo propio y los diputados federales que de perdis hagan bola, porque pedirles que entiendan lo del presupuesto, sería pedirles que bajen la luna, a excepción de Erika Sánchez, Alfredo Villegas y Carlos Castaños, porque son los únicos tres diputados federales por Sinaloa que entienden este tipo de temas y las cuestiones legislativas.