columna marco 20

“El que no se atreve a ser inteligente, se hace político”, Enrique Jardiel Poncela

 

SIN TAPUJOS

Quien nos cuentan que se quiso lucir, fue la presidenta de la Junta de Coordinación Política del Congreso de Sinaloa Graciela Domínguez Nava quien “casualmente” emitió una conferencia de prensa llamando al gobierno del estado a no vetar los acuerdos tomados por el pleno sobre las cuentas públicas.

Todos sabemos que esta mañana estará el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador en Sinaloa y aprovechando la recta (es la tercera vez que lo hace) quiere sacar a relucir su postura como la “presidenta” del Congreso.

En la conferencia de prensa, la diputada señala que la bancada de Morena no avala una cuneta pública con 4 mil millones de pesos que se ejecutaron con “opacidad” por parte del gobierno del estado, situación que pues el Congreso, y algunos de Morena rechazaron el dictamen negativo de la Comisión de Fiscalización.

En el comunicado que emitió la diputada Domínguez Nava señala que el gobierno se ha olvidado de los sectores sociales con obras como los estadios, sí los estadios, cuando la realidad es otra, pues en el gobierno de Quirino Ordaz Coppel se le ha dado la cobertura a los más necesitados.

Pero vamos un poco analizando las cosas con la diputada, ella asegura que el gobierno del estado no tiene la facultad de vetar los acuerdos políticos que se discuten y se aprueba en el Congreso, en este sentido la diputada tiene razón.

En el artículo 46 fracción III de la Constitución Política de Sinaloa, señala que los acuerdos del Congreso se remiten al Ejecutivo, quien, si no tiene observaciones deberá de publicarlo inmediatamente.

El problema es que a Graciela quien le pasó el acordeón no le específico esta parte, y del dicho al trecho puede ocurrir un veto de escritorio en este sentido en caso de tener las observaciones de los acuerdos o dictámenes.

Todo es interpretativo y eso no quiere decir que el poder Ejecutivo y Legislativo estén errados en su proceder, ya que a ambos le asiste la razón, el problema va mucho más allá y ella lo menciona al señalar que su “contraparte” quiere hacer político el tema.

La cuestión es que con la conferencia de prensa que tuvo la diputada, lo politizó no sabemos si pretendía que los periódicos y redes comentarán por doquier en el estado para que el presidente se enterara y les sobara la cabeza o no se para que buscaban el apoyo.

Aquí la cuestión es que Graciela Domínguez debe de saber como diputada que un poder no puede reconvenir a otro pues existe la separación de poderes en Sinaloa, por lo que tiene que esperar a que las cosas fluyan.

Ya la pelota está en la cancha del gobierno, y en caso, de que no se publique, tendrá que recurrir a otro poder para que busque que se cumpla lo que han estado buscando con resultados negativos los legisladores de Morena.

En esta presente legislatura hay muchas condiciones similares que se han presentado en desavenencias con el poder Ejecutivo, pero hay que recordarle a Domínguez Nava que ellos como legislativo ya cumplieron como tal con el escándalo que hicieron en su cancha.

Pero, lamentablemente, la pelota ya no está su cancha. Y el veto es una figura que está latente en estos momentos.

El asunto es que Morena quiere ir más allá, cuando los límites en los poderes se tienen y para eso existen tres, para que cuando dos tengan desavenencias sea el tercero quien logre conveniar y sacar adelante.

Y así hay muchas cosas que la líder de los morenistas en el Congreso de Sinaloa sacó a relucir. Si tanto le interesa, que deje lo mediático y ponga a trabajar a su excelente departamento jurídico que así como ha resulto conflictos internos es casi seguro que saldrán abantes con los procedimientos que realicen.

LA GIRA

Luego de más de cinco horas de viaje desde Tepic, capital de Nayarit, el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador llegó Culiacán para continuar con su gira de trabajo por el noroeste del país.

El mandatario fue recibido por el gobernador de Sinaloa, donde visitaron brevemente las instalaciones de la base militar de El Sauz, en donde este miércoles encabezará diversas actividades.

López Obrador se hospedó este martes en las instalaciones del hotel Lucerna, uno de los más exclusivos de la capital del estado, y casualmente donde se registró el primer caso de COVID-19 en Sinaloa.

El viaje se realizó por carretera, desde la capital del vecino estado de Nayarit hasta la capital de Sinaloa.  

La única parada que se realizó fue en Villa Unión, Mazatlán, en donde el presidente saludó a Don Manuel Sánchez, dueño de “El Cuchupetas”, quien lo esperaba para entregarle algunos platillos típicos para llevar por los tiempos de viaje.

El miércoles el presidente sostendrá una reunión de seguridad en el estado, para después dar su tradicional mañanera, y hacer recorridos por obras federales que se realizan en Sinaloa, como lo es el dren Bacurimí.

Posteriormente, se trasladará a Hermosillo, Sonora seguir su gira por esta parte del país.

Lo que sorprendió de esta gira es que el presidente apareció con cubrebocas en el hotel, cuando el dijo que se lo pondría cuando se erradicara la corrupción. 

En ese caso, en Sinaloa hay mensaje importante. Bueno, ya veremos.

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