columna joseluiso he visto, aunque he sabido, de reuniones de presidentes municipales con el gobernador, seguramente para discutir los planes y programas de cada gobierno pero hasta hoy no se ha visto de ellos ninguna publicidad, y vaya que les gusta la publicidad, por lo que no se dé donde ni como, surgió la iniciativa de reforma “la ley de hacienda municipal”, específicamente respecto al impuesto predial rustico en lo que concierne a elevar dicho impuesto en porcicultura y avicultura al doble, pasando de 0.5% al 1% y al mismo tiempo facultar a los bodegueros o acopiadores para que retengan el impuesto predial rustico del valor de la cosecha.

 

Lo que parecía una “bomba” por la forma en que se presentó esta reforma en “la semanera” del lunes pasado, al extremo de darle carácter de “preferente” para que decrete la cámara de diputados a la brevedad, algo que a simple vista parece de poca sustancia, por la razón de que si pretenden frenar la evasión fiscal, lo real es que la sangría del dinero que recaudan, se pierde por los que recaudan y en los pasillos y ventanillas del gobierno estatal, además de que le siguen quitando la potestad a los municipios, por que son impuestos municipales, junto con que les cobran por la maquila del impuesto, un 4% de la recaudación.

 

Entre lo que cobran por maquilar el impuesto, bajo el supuesto de que los municipios no tienen capacidad para cobrarlo, eso mismo dijeron también hace 35 años cuando se decreta el impuesto predial rustico o el impuesto municipal a la producción rural, “jineteo” del dinero que pasa por más manos y con ello más se pierde, y ahora pues los acopiadores o bodegueros, también le van a dar su “mochadita”, que ya se la daban antes, pero ahora si los autorizaran la ley.

Lo que ya aprecio y considero es que el gobierno debiera revisar la ruta de todo ese dinero que se capta de predial rustico, es revisar toda la ruta del dinero por que a los municipios siempre les hacen las “cuentas mochas”.

 

El gobierno del estado siempre les da lo que quiere cada año, al grado que de lo que en teoría se debe captar y siempre informa y decide lo que quieren que le reporten a los municipios.

 

Por ejemplo de acuerdo el valor comercial de la producción agropecuaria se suponía una captura de mil seiscientos millones de pesos para distribuir el 2023 y ¿que cree usted? Pues no les repartieron esa cantidad, sino que la suma fue por la mitad, ochocientos millones.

 

El problema que indica este ejemplo del manejo de los municipios en el gasto público de Sinaloa, es el mismo trato de “menores de edad” que siempre les han dado los gobiernos estatales y como siempre en ese manejo, los municipios salen perdiendo.

 

Ojalá y que algún presidente municipal denunciara esta situación y pugnara por una distribución justa y equitativa de los ingresos público. Por lo pronto no se ve.