Hoy es el día para los registros de los precandidatos a gobernador de la coalición que le corresponde al PRI designar, y es muy probable que sea de unidad porque difícilmente puede continuar con la zozobra y la incertidumbre de toda la coalición del PRI, PAN y PRD.
Este viernes es el último día que establece la convocatoria para los registros y ya no habrá más tiempo para que no salga a la luz el candidato del PRI y la coalición, forzosamente es hoy, y cabe preguntarse ¿Ha sido sano para la coalición y el PRI tanta espera?
En mi opinión considero que ha resultado muy desgastante para la militancia del PRI y también del PAN y PRD, haber llevado hasta estas fechas una definición que bien se pudo haber tomado en diciembre y evitar más de un mes de incertidumbre para la coalición y ventaja para sus adversarios.
Hay quienes dicen que no es así, y hasta afirman que el PRI ha ganado terreno, lo que me parece equivocado políticamente porque en toda competencia electoral, resultan clave los candidatos y más aún cuando se trata de la gubernatura estatal.
Es tan elemental, porque la contienda política se trata de concitar a la sociedad, de estimularla y animarla a participar, incluso jugar roles de candidatos en distritos y municipios, pero si no se sabe quién es el líder, la cabeza del proyecto político, pues simplemente no saben a dónde van, más allá de lo que por sí mismas las siglas del partido o coalición convoquen.
Por eso no ha sido casual que no exista mucha participación ciudadana y en las propuestas de precandidatos no vayan figuras nuevas de gente sin partido, sino que todos los registros están resultando de miembros de los partidos, como reflejo de esa incertidumbre que proyectó la indefinición del PRI.
En MORENA se entiende que ese fenómeno sea más radical porque se conoce la conformación de ese partido y lo difícil que se abra a la gente sin partido o de otros partidos. A ellos lo que les ayudó es contar con un líder reconocido y acreditado el 2018 por un contundente triunfo electoral, como ocurrió con Rubén Rocha, pero MORENA también sufre de ese ostracismo político.
Hasta hoy, los prospectos del PRI son Jesús Valdez, Mario Zamora, Javier Lizárraga Mercado y Alfredo Villegas, de estos cuatro es un hecho que saldrá su candidato, entre los que sobresalen Jesús Valdez y Mario Zamora, considerando al senador con alguna ventaja, sobre todo por el desgaste al que ha sido sometido Jesús Valdez con el doble rol de líder de partido y aspirante.
En la lógica del PRI, históricamente los candidatos a gobernador han sido, cuando han tenido al presidente de la república, nominados por este y, cuando no, han sido los gobernadores quienes han “palomeado” a los candidatos, así las cosas, aquí todo se centra en el gobernador Quirino Ordaz, quien tendrá la decisión en sus manos.
Se ha especulado durante bastante tiempo si el gobernador pugnará porque su partido gane la elección o no, a raíz de la gran amistad que ha construido con el presidente López Obrador, sin embargo considero que si él toma la decisión, como así será, porque si hubiera existido competencia interna otra cosa sería, no se arriesgará a que su prestigio se ponga en duda por lo que buscará ganar la elección y por ello sacará el mejor perfil que considere.
La batalla final tal parece está entro dos jóvenes, Jesús Valdez y Mario Zamora, quizá con cierta ventaja el último. Ya veremos.