Después del exabrupto del gobernador Rubén Rocha a la propuesta de la diputada Paola Garate, adquiere mayor sentido la posición de COPARMEX en voz de su líder Martha Reyes Zazueta, quien anuncio antes de la comparecencia del gobernador ante los diputados locales el pasado viernes, que mañana miércoles el 4 de diciembre estarán en la ciudad de Mexico a tocar puertas ante las instancias federales, tanto la cámara de diputados y senadores, como la secretaria de economía del gobierno federal.

El objetivo es amarrar un plan de acciones concretas para solventar la ya crisis económica que se viven en el centro del estado, específicamente de Culiacán que concentra casi la mitad de la población de Sinaloa y es el epicentro de muchas actividades de todos los municipios, que se ven afectados por la crisis de inseguridad y violencia que el próximo nueve de diciembre cumplirá tres meses desde que estallo.

Serán más de 90 días y es hora que no hay visos de mejoría y menos de solución al conflicto, tiempo en el que el gobierno de Sinaloa fuera capaz de presentar un plan de emergencia, que tenga como eje principal de seguridad y junto a ello la protección de la economía regional y de los trabajadores.

La COPARMEX y otros organismos gremiales, sociales y ciudadanos han expresado ideas sueltas, como revisar el pago de impuestos, servicios públicos, licencias, solicitar créditos, hasta pedir a CFE una extensión del subsidio de tarifa 1F, la del verano para todo el invierno, cuando se eleva el precio de los kilowatts en un 250 por ciento.

Si, hay que reconocer, que tanto el gobierno de Culiacán, como el estatal, han realizado acciones puntuales, como si la crisis de inseguridad no fuera de “onda larga” y que se va a resolver “un día de estos”, cuando lo que vemos es que empeora cada día que pasa.

Por eso, quienes tiene sus negocios grandes, medianos, pequeños y micros, los que cargan la viga de la economía junto con los trabajadores, se están asfixiando y exigen ya un plan en forma coherente con esa “onda larga” de la violencia e inseguridad.

Los paliativos sin duda son buenos y mejores que nada, pero las condiciones económicas que exigen medidas más profundas.

Está bien y se reconocen los esfuerzos de la fuerza armada, tanto ejército, marina, como policía estatal y municipal por que esa es la cara que afecta la economía, pero cuando la economía se está agrietando y ya tiene daños que le pueden colapsar, pues es prudente y razonable ir más a fondo como lo proponen COPARMEX y otros organismos de la sociedad.

Es triste escuchar a Martha Reyes Zazueta de COPARMEX, cuando comenta que se reunieron con el secretario de economía estatal y le expusieron que tomaran medidas de apoyo, dijeron que no podían, que “era muy difícil”, “que se ocupa nueva legislación”, “ que era muy lento”, pero nunca se decidió por un “voy a ver”, “lo platicare con el gobernador y les hablo”, “ quizá tengamos que plantearlo en Mexico”, pero no hubo nada de nada.

Por eso no es casual que todas las semanas en redes sociales, publiquen ranking de preferencias de los gobernadores en sus estados y desde que se inició esta crisis, la caída del gobernador Rubén Rocha ha sido considerable, oscilando en el 15 y último lugar, el 32. en fin, ojalá y la COPARMEX traiga algo.