columna joseluisNo se había visto en décadas en Sinaloa, un grupo de diputados apoderados del poder legislativo del estado, fueran tan dóciles, solícitos y serviles al poder ejecutivo que, a diferencia de ser un poder político representante del pueblo sinaloense, se convirtió en su peor enemigo al abandonar a todos los sectores y prácticamente a todos los problemas a los sinaloenses, a la ciudadanía que debían de representar, defender y pugnar por una mejoría en su calidad de vida, resulto lo contrario.

 

Lo más catastrófico y simbólico de la gestión de esta legislatura, es que estos diputados, se amafiaron con el poder ejecutivo para lanzar una cruzada contra la institución más grande, importante y de más historia en el estado, la universidad autónoma de Sinaloa, símbolo y patrimonio de todos los sinaloenses desde hace más de 150 años.

 

Esa cruzada, convertida en persecución política, con el objetivo de apoderarse y convertir a la universidad en una dependencia más de gobierno, precisamente contra lo que ha luchado la universidad por más de cien años, luego de que conquisto su autonomía en 1920, y ha luchado desde entonces a costa de muchos sacrificios y esfuerzos de su comunidad, resulta que ahora, los transformadores de la 4T, se les ocurrió en convertirla en un apéndice más de su gobierno.

 

Ha sido brutal la persecución que desataron desde que decretaron en febrero del 2023, la nueva ley de educación superior del estado de Sinaloa, contra la que se amparó la UAS y diez meses después, el 10 de enero del 2024, un tribunal de circuito sentencio que dicha ley de educación era inconstitucional e inaplicable para sus perversos propósitos de anular la autonomía universitaria.

 

No escatimaron en nada para atacar a la UAS, desde ese decreto inconstitucional que abiertamente violaba el artículo 3º constitucional en su fracción 7º, hasta lanzar a los “mastines” de la fiscalía general del estado, abriendo carpetas para judicializar al rector Dr. Jesús Madueña Molina y buena parte de su equipo, en aras de “doblarlos” y someterlos a su voluntad política.

 

No pudieron, ya que el liderazgo de la UAS que encabeza el Dr. Madueña, era ya un liderazgo consolidado, fuerte y con profundo arraigo en la comunidad universitaria, liderazgo que aglutino la inteligencia, la fuerza y el prestigio de la comunidad universitaria, constituyendo un equipo de abogados que batalla tras batalla legal, derroto al gobierno y al congreso del estado, quienes no repararon en nada para fabricar delitos, que incluso, corrompieron hasta la medula a los tribunales y a los medios de comunicación.

 

Luego el “musculo” político de la universidad, el cual solo ocupo dos manifestaciones estatales de más de 100 mil universitarios, que luego se impusieron a pequeñas huestes de seguidores de los diputados, quienes nunca salieron del ridículo.

 

Y algo que fue vital y que pareciera intangible, son los resultados de la UAS y el enorme prestigio nacional e internacional que ha adquirido durante décadas.

 

Poco a poco, se fue sintiendo la amalgama que representaba la inteligencia de la el equipo jurídico de la UAS, la gran organización institucional de sus trabajadores, maestros y alumnos y evidentemente el reconocimiento y respaldo que se ha ganado de la sociedad y la comunidad científica, cultural y deportiva de México y el mundo.

 

Por eso no es casual el desplegado que publico la ANIES (asociación nacional de instituciones de educación superior), donde le expresa a la UAS, más de 200 instituciones su respaldo a la defensa de la autonomía universitaria y llama al congreso del estado a detener su escalada política contra la autonomía universitaria.

 

No sé qué tanto escucharan este llamado estos diputados, que no le han servido al pueblo de Sinaloa, pero sin duda ese desplegado del ANIES, es el colofón para que se abstengan de continuar por esa ruta política.

 

Será muy difícil ver que retrocedan, después del escandaloso fracaso de la ilegal consulta que implementaron, pero si les queda una pizca de inteligencia, debieran darlo.