El lunes 15, a primera hora, las campañas electorales locales de presidentes municipales y diputados locales, estarán arrancando incorporando más o menos doscientos candidatos por cada partido, 20 veces más que los que ahora compiten por las posiciones federales, por lo que ahora sí, será una romería por las calles de todos los pueblos y ciudades, ofertándose toda clase de personalidades y promesas, donde el elector no se podrá quejar, tendrá “para escoger y tirar para arriba”.
Nadie se podrá quejar, precisamente por que habrá representantes de toda la diversidad que constituye nuestra sociedad, lo que de suyo debiera indicar que no quedaría elector “sentido” y no tendría ningún pretexto para no votar, pero como es la condición humana, siempre hay pretextos o argumentos para rechazar.
Por eso quien crea que los ciudadanos están muy entusiasmados y sera una elección inédita, se equivocan.
La sociedad en la modernidad vive un ruido social cada vez más estruendoso que se escucha poco y se dialoga menos. Por eso las campañas serán muy intensas y precisas, así que, si quieren tener éxito, los candidatos y candidatas, deberán presentar “hojas de vida” lo más positivas y creíbles.
Es cierto, que todos los partidos políticos tienen una base social cautiva, que les garantiza un determinado número de votos, pero ese voto cautivo no alcanza para ganar en el mejor de los casos, como sería el del partido MORENA y la 4T que tienen todo el poder de los gobiernos, pero como decía el viejo Galilei, también pueden perder.
La competencia existe en todos lados y nada está definido de antemano para nadie, por lo que será muy importante la capacidad de impacto social de los candidatos, el contenido político que desplieguen, la capacidad de alianzas sociales y el carisma que refleja frente a los ciudadanos.
Las candidaturas alineadas en el bloque de MORENA y la 4T, tendrán la ventaja de que son gobierno, tienen el poder político y el dinero de las instituciones, además de que han sido cínicos sus liderazgos, cuando pretenden una elección de estado y eso guste o no, legal o no, honesto o no, es una ventaja para ellos.
Pero bien se dice que donde está su fortaleza, esta su debilidad, por que eso los hace comodinos, arbitrarios e intolerantes y prepotentes, características nefastas para atraer apoyos.
El otro bloque, el de los alineados a la oposición, tienen la ventaja de poder hacer las críticas al poder y señalar los defectos del gobierno, recordando que todo ejercicio de poder desgasta, que, si son capaces sus líderes y candidatos, de catalizar políticamente todo ello, obtendrán ventaja.
Hay un tercer bloque de candidatos, los de M.C., PT, PES y PEVM, que se mueven en el limbo de las indefiniciones, de la nada política y son mas parte de la coreografía que de la obra, por lo que su rol está muy definido por quien van a trabajar y eso está por verse.