China está viendo un número casi récord de casos de COVID, lo que ha llevado a las principales ciudades, desde Beijing a Shanghái, a regresar a las restricciones a los movimientos de la población y ejercicios de pruebas masivas para contener los brotes.
Este martes se registraron 28 mil 183 nuevas infecciones en todo el país, frente a las 27 mil 307 del lunes y apenas por debajo del récord de 28 mil 973 alcanzado en abril, cuando Shanghái se fue al confinamiento en medio de un aumento de casos sin control.
El aumento de las infecciones se produce en un momento crucial para China, que ha decidido adoptar un enfoque más específico para contener el COVID-19.
Después de disminuir inicialmente las pruebas y las restricciones de movimiento, de acuerdo con un nuevo ‘libro de jugadas’ del Gobierno, los funcionarios en algunos lugares están imponiendo nuevamente órdenes de pruebas masivas y bloqueos.
Si bien las autoridades tienen cuidado de evitar las órdenes de cierre en toda la ciudad, como las que se vieron en Shanghái a principios de este año, una creciente red de restricciones significa que un total de 48 ciudades chinas están sujetas a algún tipo de medidas contra la circulación generalizada de personas.
Mientras tanto, el caos ha regresado a la fábrica de iPhone más grande de China, con los trabajadores de la planta de Foxconn Technology Group en Zhengzhou, peleando con el personal de seguridad en las primeras horas de este miércoles, en medio de la ira por las duras restricciones anti-COVID.
El sitio de fabricación, conocido como ‘iPhone City’, ha estado bajo un sistema de ‘circuito cerrado’ durante semanas después de que un brote del virus SARS-CoV-2 se propagó por la metrópolis circundante y llegó a la planta.
Viajes restringidos
En los últimos movimientos restrictivos, Shanghái prohibió que las personas que lleguen a la ciudad visiten lugares públicos durante cinco días a partir del jueves, ya que el centro financiero busca aislarse del brote.
Las personas que viajen a Shanghái, que reportó 68 casos este martes, no podrán acceder a lugares como restaurantes, pubs, centros comerciales, supermercados y mercados húmedos, así como cibercafés y otros lugares de entretenimiento durante esos cinco días.
En Beijing, que reportó las primeras muertes de COVID de toda China en casi seis meses durante el fin de semana, los residentes deberán proporcionar un resultado negativo de la prueba de PCR realizado dentro de las 48 horas anteriores antes de poder ingresar a lugares públicos o tomar un autobús, esto a partir del próximo jueves.
