columna oswaldo villaseñor

 

Ahí les va para quienes buscan los mismos códigos visibles –no los invisibles pero que existen- que han regido el proceso de sucesión en Sinaloa. Esos ya no serán así.

En Sinaloa hay juego nuevo e inédito..

Las consecuencias del jueves negro que vivió Culiacán marcará no solo un antes y un después en muchas cosas. En la sucesión tanto de alcaldes como de gobernador, se tendrán que meter a la licuadora nuevos códigos que lo volverán inédito.

Y es que si antes los poderes fácticos, entre estos empresarios, delincuencia organizada, medios de comunicación entre otros, que en muchos de los casos han jugado como entes invisibles en la elección de los gobernantes, hoy juegan desde ya, un juego visible y abierto.

En pleno proceso electoral del 2018 donde se dio una guerra de fotografías donde aparecían empresarios de gran cala en Sinaloa flanqueando a uno y otro candidato nos hicimos una pregunta que para ese momento era clave y en ese mismo momento se encontraba la siguiente respuesta.

Aquí el comentario hecho en nuestra columna del pasado 1 de mayo de 2018.

¿Por qué son importantes estas fotografías donde aparecen los empresarios con los candidatos de uno u otro partido?. La respuesta es la siguiente. Son importantes por una razón. Porque obliga a hacer una pregunta clave. ¿De qué color político son los empresarios?.

La respuesta más simple pudiera existir; es que de varios, o sea el de su elección o simpatía, pero la verdad no es así.

El color de los empresarios, es el color de los negocios y le apuestan al que creen que va a ganar, para ganar ellos junto con él.

Pues bien, ese escenario que privó en el 2018 ya no es, y el jueves negro lo destrozó.

Hoy, hay que hacerse una pregunta obligada otra vez.

¿Y en Sinaloa por dónde jugarán los empresarios?.

A ésta pregunta hay que agregarle otra más que hay que ver con mayor detenimiento. ¿Si el narco también juega a la política, por donde podría jugar en el 2021?.

Aquí dos sucesos que pueden dar una luz en la búsqueda de esta respuesta.

1.-En nuestras columnas del pasado 1 y 3 de octubre donde describimos la nueva la guerra de fotografías donde aparecen empresarios de gran calado en Sinaloa, primero unos con el Senador Rubén Rocha Moya y en otra con el Senador Mario Zamora previo a la rendición de su primer informe, comentamos entre otras cosas, que en el sector empresarial hay preocupación porque no ven claridad por donde se puede definir la sucesión en el 2021.

2.-Pues bien. Esa preocupación pareciera haberse vuelto pánico entre algunos sectores o personajes del sector empresarial pero con una gran claridad de que rumbo quieren para Sinaloa. ¿No creen los empresarios en los niveles de aprobación del gobernador o qué?.

Y es que juzgar por lo visto, los empresarios confunden niveles de aprobación social a indicadores de gobierno, con ver a un gobernador políticamente fuerte por ejercer control político como lo han hecho otros gobernantes que incluso llegaron a tener bajos niveles de aprobación gubernamental.

3.-Aquí los dos sucesos que pueden influir en el juego nuevo o inédito para la sucesión en Sinaloa. Recientemente un grupo de no más de 10 empresarios originarios de Culiacán, pero considerados como parte de la nomenclatura empresarial de Sinaloa, durante un encuentro o convivencia, hicieron una pregunta de tajo.

¿Es real que Quirino es el campeón de las encuestas o le está metiendo mucho dinero?. Para asombrar la primera pregunta formulada.

4.-La respuesta desmenuzada –si la piden la ponemos en la siguiente entrega- pero en general comentamos que las encuestas son para interpretar y hay que saber leer.

Las encuestas dadas a conocer hasta el momento miden indicadores de gobierno como honestidad, combate a la corrupción, obra de gobierno, capacidad de administración, cercanía a la gente, seguridad pública entre otros y en eso es real que la gente vea bien al Gobernador y le da puntajes altos de aprobación.

5.-Pero una cosa es la aprobación de gobierno y otra cosa es tener un gobernador políticamente fuerte, que es consecuencia de tener en sus manos todos los hilos del poder.

Así el sector empresarial a estas alturas tendría que preguntarse que quiere para el 2021. ¿Un perfil que garantice un buen gobierno donde todos ganan o un gobernador amante del control político pero donde muy pocos ganan y la mayoría pierde?.

¿Dónde se ubica Quirino?.

6.-Pero el siguiente suceso se da en Los Mochis y también ante un grupo de importantes empresarios. Aquí la preocupación fue mucho más evidente.

La primera pregunta formulada fue la siguiente acompañada del siguiente contexto. El sector empresarial no está contento con el Gobierno de López Obrador de ahí la lucha que libra a través de Coparmex y varios actores del sector empresarial.

Pero también dejan claro que no quieren que Morena llegue al Gobierno de Sinaloa y mucho menos repita en Ahome.

Y viene la pregunta. ¿Quirino ya se entregó a Morena y entregará le gubernatura?.

Ufff, pregunta fuerte y pesada aunque fue hecha como una afirmación. ¿Así lo ven los hombres del dinero?

La respuesta –con detalles si la piden, la damos en la siguiente entrega- fue la siguiente. Hay muchas formas de entregar un poder y también hay una gran confusión en el significado de conceptos.

Lo que para unos es entregar, para otros puede ser una capacidad de tejer alianzas o acuerdos. De la respuesta en detalles se desprenden los tres escenarios y nombres de quienes pueden ser los sucesores de Quirino con posibilidades reales de llegar. Todos serían priistas.

7.-Pero si en el sector empresarial hay definiciones en su gran mayoría, en el narco quizás no existan del todo, -eso no lo podemos saber del todo pero sí interpretar- pero lo que sí está muy claro, es que hay fuertes rupturas.

El intento de aprehensión de Ovidio Guzmán y su triunfo ante el Presidente, pero también el señalamiento desde esferas del Gobierno Federal de verlo como el presunto responsable de la masacre de la familia Lebaron, hablan de una fuerte ruptura o distanciamiento –según sea el caso- con el Gobierno de López Obrador.

¿Y si el narco juega, le apostará a la llegada de un candidato de Morena a la gubernatura de Sinaloa?. Es evidente que esa parte ya se desalineó.

Ya muchos piensan que no, y que un resultado no explorado aun del todo del jueves negro en Culiacán, es que varios proyectos personales que se tejían como los más viables abrazados desde la Presidencia, se cayeron por el momento.

8.-¿Se pueden tejer de nuevo relaciones y proyectos?. Desde luego que sí, pero por lo pronto hay evidencias de que están rotos.

Así que juego nuevo para Sinaloa y condiciones abiertas no antes vistas.

¿Los detalles?.

Habrá que estar pendientes.