La tolerancia llegará a tal nivel que las personas inteligentes tendrán prohibido pensar para no ofender a los imbéciles”. Frase de Fiódor Dostoyeski.
El gober de Sinaloa, Rubén Rocha tendrá una reunión con el nuevo secretario de Seguridad Pública del Gobierno Federal, Omar García Harfuch el día de hoy. Bueno, cuando menos eso es lo que anunció el día de ayer.
En su cuenta de X puso el siguiente mensaje.
“Agradezco al Secretario Omar García Harfuch (@OHarfuch), titular de la @SSPCMexico del @GobiernoMX por su disposición a atenderme mañana sábado en la Ciudad de México, para sostener una reunión de trabajo relativa a la seguridad del estado de Sinaloa”.
Hasta ahí el mensaje.
Esta reunión es clave para definir el rumbo de la vida cotidiana de Sinaloa. Omar García Harfuch para muchos es y será el verdadero Secretario de Gobernación. Es el hombre más cercano a Claudia Shienbaum y según se dice, quien goza de todas sus confianzas.
García Harfuch no solo es el Secretario de Seguridad, es el enlace de la presidente con las fuerzas armadas -¿legales e ilegales?- y también quien ahora controla los servicios de inteligencia del gobierno federal. Es decir, la gobernabilidad del país que le interese a la Presidente Claudia Shienbaum lo verá y se verá a través de Omar García Harfuch.
Es por eso la importancia de la reunión del Gober Rocha. Ahí se puede definir muchas cosas.
Ayer fue un día negro para el Gober Rocha. Dos revelaciones mediáticas lo volvieron de nuevo la estrella del momento.
Uno fue un largo y muy documentado reportaje de la revista Proceso que da cuenta de sus supuestas relaciones con el narco y el otro fue un documental de la periodista Anabel Hernández quien muy a su estilo hace revelaciones, muestra “pelos y señales” que no son desconocidas para muchos sinaloenses, que son secretos a voces, pero que no sé dicen ni se decían abiertamente.
El reportaje firmado por Aaron Ibarra narra lo siguiente: El gobernador morenista Rubén Rocha Moya está al borde del abismo cuando llega a la mitad de su sexenio. Acorralado por su presunta relación con el Cártel de Sinaloa y con el territorio que gobierna semiparalizado por la violencia que ha dejado decenas de víctimas, el mandatario se encuentra bajo el escrutinio de los órganos de inteligencia del gobierno federal mexicano ante la sospecha de haber tomado partido por el grupo criminal de Los Chapitos, traicionando a la facción del Mayo Zambada.
De acuerdo con información obtenida por Proceso, el Centro Nacional de Inteligencia (CNI) y los servicios de inteligencia militar “dan seguimiento personal y mantienen vigilado” a Rocha Moya por instrucciones del entonces presidente Andrés Manuel López Obrador y con el aval de la presidenta, Claudia Sheinbaum”. Hasta ahí la cita inicial del reportaje de la Revista Proceso.
¿Quien dirige formalmente los destinos de los servicios de inteligencia? Pues nada más y nada menos que Omar García Harfuch. El mismo que hoy verá Rubén Rocha.
¿Qué información tiene en sus manos Harfuch? -así se le llama- ¿que le podrá mostrar al gober de Sinaloa?
¿Estará en su escritorio la orden de sacarlo del atolladero o la encomienda de pedirle que renuncie por motivos de Salud o por invitación a algún cargo en el gobierno federal?
Pensar en un enjuiciamiento, sería muy remoto. Es más, casi imposible. Así que solo quedan dos caminos por seguir.
¿Se va o se queda contra todo y a pesar de todo? Lo cierto es que si la violencia que azota a Sinaloa no es una prioridad para el nuevo gobierno, el gober Rocha si lo es. ¿O lo salvan y lo limpian, o le dan las gracias y lo convierten en el sacrificado para legitimar en los hechos el gobierno de Claudia Shienbaum? No hay más sopas servidas por el momento.
De la reunión que sostenga hoy con Harfuch se podrá visualizar para donde se va. Lo que sí, es que hoy el gober Rocha está muy desgastado políticamente y ya es un “peligro para el naciente gobierno”.
Lo revelado por Anabel Hernández en su comentario, al señalar que Faustino Hernández fue el enlace del Mayo Zambada para entregar grandes cantidades de dinero para la campaña de Claudia Shienbaum, le echa más leña a la hoguera donde se verá si solo le darán calor a un gober que suda frío, o lo preparan para freírlo y sacrificarlo.
El rumbo de Sinaloa se podrá definir hoy.
1.-Justo un día antes de la toma de protesta de Claudia Shienbaum en un círculo cercano al poder presidencial, se empezó a hablar de que la renuncia de Rubén Rocha era inminente. Consultada y rebotado con varios actores, el rumor fue confirmado.
Esa es la causa del por que los periodistas al ver llegar al gober Rocha a la toma de posesión de Claudia, la primer pregunta que le lanzaron fue si iba a renunciar. El rumor andaba fuerte y era real.
El gober Rocha contestó que No pensaba renunciar, que tenía el apoyo de la presidente Claudia Shienbaum -quien apenas días antes lo balconeo- y dijo que no había razones para hacerlo.
2.-El asesinato de Faustino ya permea y pega en la misma presidente. El asesinato de Cuen y el secuestro de Él Mayo Zambada abrió una guerra de la cual el ex presidente AMLO siempre dejó evidencia de que no quería. La revelación del General Jesús Leana de que el regreso de la paz y la tranquilidad a Sinaloa depende de los grupos armados que negocien y se frenen sus enfrentamientos, ya se han convertido en una razón de peso para intervenir en Sinaloa.
Insistimos; ¿Cómo intervendrá el gobierno Federal? ¿Salvando y limpiando a Rocha o pidiéndole su renuncia?
Andrés Manuel y por ende Claudia hicieron esfuerzos por mandar señales de que el gobierno federal nada tuvo que ver con el pleito de los Guzmán y Los Zambada. No agarraron partido.
¿Qué le podría afectar a Rocha? Evidentemente el haber agarrado partido si es que lo tomó. Harfuch a estas alturas debe tener información suficiente de si lo hizo o no.
La evidencia dejada en videos que se hicieron públicos por la misma gente donde agentes de tránsito le abrían paso a convoys de gente armada, o ver a policías municipales en sus patrullas platicar con sicarios y el desarme de la policía municipal de Culiacán, pueden arrojar elementos para salvar o para hundir a Rocha.
Por lo pronto, hoy estará con Harfuch. De ahí se definirá el rumbo que siga Sinaloa y de paso el futuro de Rubén Rocha.
¿Lo salvan o lo sacrifican? No hay más.
Habrá que estar pendientes.
PASO A PASITO.-La imagen del Gober Rocha ha salido dañada. Su inmenso poder no.
El pleito que revivió con la UAS le era vital. Había que mandar una señal de fuerza política, inspirar miedo y frenar posibles movilizaciones sociales tras la pérdida del respeto y de la credibilidad a su gobierno.
Lo mismo sucedió con los productores agrícolas. Revivieron las demandas penales en contra de algunos participantes en los movimientos agrícolas. Ambas decisiones, son instrumentos de contención.
¿Y si se logró contenerlos? Eso también se va a saber. Veremos hasta dónde llegan las manifestaciones de la UAS y qué hacen los productores agrícolas ante un año complicado como el que viene y el inminente nuevo abandono que se reflejará en el presupuesto que está por aprobarse en unas semanas más en el Congreso Federal.
OTRO PASITO.-Tras la separación del cargo del doctor Robespierre Lizárraga, -el segundo rector separado de la UAS por ro gobierno de Rocha- asumió el cargo el doctor Candelario Ortiz Bueno.
Su primera intervención fue para anunciar un paro indefinido de labores y el inicio de manifestaciones públicas a partir del próximo lunes.
¿De qué tamaño e intensidad serán las manifestaciones?
Eso se verá.
Lo cierto es que si la UAS o mejor dicho quienes la dirigen ahora se lanzan con todo en contra del gobierno de Rocha el estado arderá aún más de lo que ya arde.
Ya veremos dijo el ciego.
PASITO CHÉVERE.-
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