Se despide el presente año con varios sucesos que marcan la vida político-social de Sinaloa; nueva clase política “amalgamada”, donde los colores dejaron de ser obstáculo para la convergencia, también finaliza este 2021 con partidos políticos desdibujados, personajes políticos en diferente línea, unos emergentes, otros marginados y algunos agazapados. AÑO MORTAL que se despide con gran cantidad de hogares enlutados, por la pandemia del covid19 o por violencia y daños que provoca el narcotráfico, en ambos casos con responsabilidad de AMLO, el presidente de México, pero sus principales colaboradores no están al margen de las culpas en estos temas mortales, ya que sus acciones han sido armas letales a lo largo y ancho del país, donde Sinaloa tiene dolorosa esquela en la oscuridad del gobierno y la complicidad u omisión de pseudo políticos.

SINALOA rumbo al 2024. Varios en movimiento, los del PAS y MORENA están activos desde varias trincheras, los del PAN siguen pegados a sus enredaderas, los partidos rémoras sirven de salpicaderas, los del PRI ajustan sus acuerdos para levantar bandera y los de Movimiento Ciudadano desde enero empezarán su carrera, o sea, el 2022 será un año político de principio a fin, según los actores que estamos viendo y los que sigan surgiendo, Sergio Torres trae la misión de pintar a Sinaloa de color naranja, con la motivación de Luis Donaldo Colosio Jr.

RUBÉN ROCHA Moya empieza su sexenio gubernamental estrenando la modificación a la ley, entrando dos meses antes de como anteriormente sucedía, pero con ciertos compromisos heredados, sin presupuesto propio y con un déficit financiero que por mejor que se quiera ver, no deja de ser preocupante y despierta críticas en algunos sectores, pero nadie ha sido contundente para cuestionar de forma completa, sin embargo, el gobernador Rocha ha sido “consecuente” y prudente con la administración anterior, además de que ha mostrado pluralidad en su gabinete, con notorias improvisaciones, a quienes se les podrá evaluar en un tiempo prudente para ver los resultados de hombres y mujeres que hoy ostentas cargos de primer nivel en el gobierno sinaloense, obviamente que en subsecretarías y direcciones también existe mucha improvisación, pero en el ejercicio de gobierno la responsabilidad recaen en cada secretario o secretaria, por tal motivo es donde los reflectores están puestos y desde luego que el gobernador lo sabe.

MELESIO CUÉN Y RUTH DÍAZ, los secretarios más visibles del gabinete de Rocha, pero también son dos de los de mayor capacidad para la función pública, ambas personas cumplen con los requisitos para ocupar el cargo y en el caso de Héctor Melesio Cuén Ojeda, es notorio que como Secretario de Salud, sabe bien lo que hace, sin titubeos atiende la pandemia del coronavirus y a la vez está haciendo ajustes al interior de la Secretaría, donde seguramente incluye surtir de medicamento a los hospitales, con la prioridad necesaria, porque el desabasto es dañino y afecta de forma crítica y hasta mortal al derechohabiente, mientras que la Secretaria de la Secretaría del bienestar, Ruth Díaz Gurría llega a una de sus áreas favoritas, debido a sus conocimientos del socialismo mexicano y la forma de vivir del ciudadano, ella es joven de edad, pero con cierta cancha recorrida, buenos estudios y fogueo en áreas de gobierno federal, por lo tanto, para Ruth, esto debe ser satisfactorio, porque para ayudar a la población no basta con tener la intención o buenos propósitos, sino conocer, tener las herramientas y respaldo del aparato gubernamental y al parecer, ella cuenta con este set para el cargo conferido en Sinaloa, mientras que en la parte política habrá que verla, pero de acuerdo con sus orígenes y semblante, lleva buen rumbo, además de mostrar un buen comportamiento a la hora de aparecer en la escena política del estado, en otras palabras, no se le ve complicado el accionar político a la guamuchilénse.

LOS ALCALDES iniciaron su gobierno el mismo día que el gobernador, sólo que en ayuntamientos es la segunda ocasión que sucede, pero aquí lo relevante es que estamos viendo una competencia política entre cada uno de los presidentes municipales, donde destacan, el de Mazatlán, Luis Guillermo Benítez Torres y el de Ahome, Gerardo Vargas Landeros, lastimosamente vemos que el de la capital no muestra capacidad, pero ya veremos si endereza el rumbo, aunque puede ser complicado ya que Jesús Estrada Ferreiro tiene una confrontación con el gobernador Rubén Rocha Moya y con los diputados morenistas del congreso estatal, el encono con los de su partido (morena) se ve raro, mientras que en Ahome, GVL está manejando su política realizando acciones públicas que el anterior dejó de hacer, poniendo un toque de color a su administración, como el cambio de colores a las patrullas de la policía municipal, obviamente que lleva todo el sentido político rumbo a las elecciones del 2024, bueno, pues así están los tiempos y en Mazatlán, el Químico empezó su segunda administración inaugurando obras y una sólida campañas de asistencia social, reforzando la que existe desde el gobierno federal, pero además, Benítez Torres logró involucrar a sectores del puerto y el ciudadano lo está aceptando, así mismo ha realizado ajustes en su gabinete, dándole estatura política a su administración, mientras que su esposa, Gaby Peña Chico realiza acciones sociales desde el DIF en beneficio de niños, adultos mayores y población vulnerable, bueno, esto es lo mejor que estamos viendo, sin embargo, LO PEOR es lo que hoy se está viendo en el Ayuntamiento de Navolato, donde la presidenta Margoth Urrea Pérez anda perdida, no sé si por incapacidad o por falta de apoyo, pero lo cierto es que denota incapacidad, donde los navolatenses están pagando las consecuencias, entonces, vamos a ver qué sucede en el próximo año 2022, donde los presidentes municipales Luis Guillermo Benítez , Gerardo Vargas y Jesús Estrada ya enseñaron sus cartas credenciales, mostrando de que están hechos, veremos si sobresale algún otro alcalde o alcaldesa durante el 2022, porque la carrera rumbo al 2024 ya empezó en las alcaldías sinaloenses y eso es más que notorio.