Hoy llega a Sinaloa el presidente López obrador, la segunda en menos de un mes, espacio tan breve llama la atención para un estado como Sinaloa, una entidad sin proyectos, ni coyunturas con un gobierno estatal ineficaz en la promoción económica y estratégica, por lo que resulta muy “equis”, como dice la chavalada, que ese sea el tema de una gira presidencial, cuando el sistema de salud sinaloense lo dejo en terapia intensiva el gobierno de Quirino Ordaz, que fue ineficiente e irresponsable ante la pandemia de COVID-19, donde se estima murieron 20 mil sinaloenses.

Quirino Ordaz nunca concluyo el hospital general, el que se encuentra en la salida a Imala. Ni el centro de salud Nº1, como tampoco el hospital pediátrico de Sinaloa, al grado que en los más de dos años del gobierno de Rubén Rocha se ha dedicado a concluir el centro de Salud, avanzar en la conclusión del Hospital pediátrico y convertir el hospital general en un cuartel de la guardia nacional.

Lo que debió ser la prioridad número uno del gobierno de Rubén Rocha, la salud, precisamente por que cuando el llego al gobierno el 2021, concluía la pandemia y en ella el sistema de salud sinaloense, mostro todas sus fragilidades y carencias, lo que no se hizo desde entonces.

Hoy, como si fuera una “varita mágica”, a la 4T se le ha ocurrido centralizar todos los sistemas de salud estatales, transfiriéndole al gobierno federal todo lo que habían acumulado en infraestructura y planeación regional en los últimos 25 años, para volver al gigantismo institucional para que se convierta en un “elefante dentro de la sala”.

El gobierno de Sinaloa, sin ningún empacho, ha transferido a IMSS – Bienestar 230 centros de salud, los hospitales generales de Mochis, Guamúchil, Culiacán y Mazatlán, todo el personal con que cuentan y también los problemas, como la insuficiencia de personal médico, el abasto de medicamentos, cuando no hay clínica que no padezca este problema.

¿Qué va a hacer el gobierno de Sinaloa? Pues se va a convertir en gastos y empleados del gobierno federal, porque la carencia, ausencias e ineficiencias, no se las va a reclamar la población al gobierno federal, sino al gobierno estatal.

¿Por qué no se dio cuenta el gobernador que el sistema de salud nacional no es prioridad del gobierno de AMLO?¿acaso no supo de la disminución presupuestal para el ejercicio 2024 para salud, que los diputados de MORENA aprobaron? Ó ¿tampoco sabe que la lucha que logro en 1997 la descentralización de los sistemas de salud fue un paso para acercar el sistema a la sociedad y hacer participe a los gobiernos estatales?

Y para finalizar ¿Quién le dijo al gobernador que esta centralización resultaría eficaz? ¿que no vio el gran fracaso que significo el INSABI? ¿que no supo que se convirtió en la “cueva de Ali-Baba?¿acaso no está informado que la “supe farmacia” es un show político para enredar y apantallar incautos?

¿a qué viene el presidente a Sinaloa?¿a dar “atole con el dedo”?, por dios, ¿Qué les pasa?. Lo bueno que todavía queda pinole.