Los datos duros de la Pandemia ya se están comenzando a reflejar en números, mismo que ha señalado recientemente el INEGI y es que en su ultimo reporte señalo que durante los meses críticos de la pandemia han cerrado un millón 10 mil empresas en nuestro país reporte generado de la encuesta sobre el impacto generado por el COVID-19.
Preocupante el dato de cierre de empresas, es que aunado a eso hay perdida de empleo y según las estimaciones del propio INEGI son de alrededor de 3 millones de personas que laboraban en ellos, sumado a la disminución de 1.14 millones de personas que trabajaban en las empresas que todavía sobreviven.
El Estado de la Republica que mas afectación a tenido con el cierre de empresas ha sido Quintana Roo donde la tasa de mortalidad de empresas fue del 31.9% de ahí le siguen Baja California Sur con el 28.1%, Sinaloa con el 27.7%, Tamaulipas con el 26.6%, Nuevo León con el 25.7%.
Los encuestados coincidieron en que la falta de apoyos fiscales, aplazamiento de pago de créditos y acceso a créditos nuevos han sido el mayor factor que los ha orillado a tener que cerrar definitivamente las cortinas, y es que unicamente el 7.8% del total de 4.9 millones de unidades económicas que existían al cierre del año 2019 recibieron algún tipo de apoyo, como sabemos lo único que se recibió fue aquel famoso súper crédito otorgado por el IMSS de $25,000 pesos mismo que estoy seguro que quizás para lo único que sirvió fue para no atrasarse en el pago de las cuotas obrero patronales a dicho Instituto.
Las mayores afectaciones que han tenido han sido disminución de ingresos, baja en la demanda y escases de insumos, lo cual resulta lógico ante el cierre que tuvimos del periodo de abril a julio, si bien es cierto ahorita existe una apertura, todos tenemos miedo en gastar y la razón mayor es que sabemos perfectamente bien que de parte del Gobierno, y no solo a nivel Federal añadamos los Estados y Municipios, de ellos no obtendremos ningún apoyo, agregarse el temor de enfermarse y el gasto que a las familias le ocasionaría, por que volvemos a lo mismo, el sector salud no cuenta con los insumos suficientes para atender a la población, rasquémonos con nuestras propias uñas.
Estamos en pleno rebrote, con mas casos de COVID que cuando supuestamente estaríamos en el pico de la pandemia, el temor es inminente de un nuevo cierre, el cual siendo honestos, no hay empresa que vaya a soportar tal situación, por ahí dicen que los empleos se generan con decretos y no con mayor inversión privada, como país no estamos en condiciones para soportar una nueva suspensión de labores ya que hasta los ahorros se terminaron y me refiero a los gubernamentales, y le recuerdo que las obras faraónicas siguen su proceso de construcción.
CP y MI Gilberto Soto Beltrán.
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