= MoReNa presidirá JuCoPo y PVEM, la mesa directiva

 

= Remotísima la posibilidad de un cambio de ideas

 

= Martes 1 de octubre, instalación de la nueva cámara

 

= Sin la postura de la UAS, aprobarán la ley de educación

 

= Trabajan en la organización de la feria ganadera regional

 

Definido, con bastante anticipación, que la doctora María Teresa Guerra Ochoa presidirá la Junta de Coordinación Política durante los tres años de la sexagésima quinta legislatura del Congreso del Estado, la pregunta obligada es ¿qué diputado o diputada encabezará la mesa directiva de la nueva cámara en su primer año de sesiones, mismos que comenzarán a contar a partir del primero de octubre venidero?

La nueva legislatura, con aplastante mayoría de MoReNa y de la Cuarta Transformación en términos generales, llevará a cabo su sesión previa el lunes 30 del mes en curso y al día siguiente quedará debidamente instalada en los términos ordenados por la Constitución Política de Sinaloa y la ley orgánica del Congreso del Estado.

El precepto constitucional establece que un solo partido no podrá presidir, al mismo tiempo, los dos órganos de gobierno del Poder Legislativo; pero no prohíbe que el titular de la mesa directiva milite en alguno de los partidos aliados. En este caso en particular, el Verde Ecologista Mexicano y el Partido del Trabajo.

Si no hay reasignación de curules plurinominales, de aquí al 30 del mes en curso, MoReNa llegará a la legislatura 65 con 24 diputados; el PVEM con 6 y el PT, con 2. Entre los tres partidos, la 4-T suma 32 diputaciones, que representan el 80 por ciento del total. Solo quedaron 8 curules opositoras repartidas entre el PRI, el PAN, el PAS y Movimiento Ciudadano, a razón de 2 bancas por partido.

Bajo esta circunstancia, la lógica más elemental mueve a pensar que uno de los seis diputados o diputadas del PVEM resultará electo como presidente o presidenta de la mesa directiva, lo que marcará el control total de la Cuarta Transformación de la legislatura en puerta.

Déjeme decirle, a este respecto, que la presidencia de la mesa directiva solo requiere del voto de 21 diputados (la mayoría simple) y que no necesariamente debe surgir del partido que sigue en votos al que tiene la mayoría.

Podría recaer en cualquiera de las fracciones, independientemente de su número de legisladores, siempre y cuando tenga el voto mayoritario, que evidentemente será inducido por MoReNa, al contar con el 60 por ciento de la integración total de la nueva legislatura. No hay que descartarlo. Como estrategia no estaría nada mal.

Si es el PVEM, como la lógica lo señala, saltará de la fracción conformada por Briseida Valenzuela Buichia, Antonio Menéndez de Llano Bermúdez, Juan Carlos Villa Romero, Martha Yolanda Dagnino Camacho, Rodolfo Valenzuela Sánchez y Yeraldine Bonilla Valverde. Una fracción que apenas y si alcanzó el 6 por ciento de la votación y que, increíblemente, tiene el 15 por ciento de las 40 curules.

¿Qué en realidad todos militan en MoReNa y que lo del PVEM fue una jugada magistral del gobernador Rocha?

Pues a lo mejor sí; pero esta es otra historia.

Por el momento, entretengámonos, de aquí al 30, con explorar quien será el presidente de la mesa directiva del Congreso del Estado, como si esto representara la salvación de nuestro querido Sinaloa.

En fin.

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Por cierto.

A las 24. 00 horas del miércoles 18 de septiembre feneció el plazo otorgado por el Congreso del Estado a la Universidad Autónoma de Sinaloa para que la institución turnase al Legislativo su posicionamiento sobre la nueva ley orgánica de la UAS.

Esto, desde luego, no ocurrió. Ya se esperaba.

¿Qué sigue?

Que la comisión de Educación, Ciencia y Tecnología del Congreso del Estado emitirá su dictamen sobre la citada ley orgánica de nuestra máxima casa de estudios superiores; la turnará al pleno y se votará antes de que termine este mes con sus fiestas patrias que nos pasaron de noche a todos los culichis.

Un dictamen basado en las 36 iniciativas vigentes en la cámara de diputados y en los resultados de la consulta a la comunidad universitaria realizada a mediados de la semana pasada.

¿Ahí terminará todo?

Lo dudo.

Habrá que estar pendientes. Bien pendientes.

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Mientras.

Sin desestimar la complicada situación que se vive en la entidad, la Unión Ganadera Regional -que preside el ingeniero Faustino Hernández – mantiene firmes los trabajos de organización de la tradicional feria ganadera de cada año, aquí en Culiacán.

La feria ya tiene fecha: del 14 de noviembre al primero de diciembre. Un evento muy esperado, que precede a las fiestas navideñas de nuestra ciudad.

Evidentemente el comité organizador de la exposición ganadera no ignora las circunstancias actuales; pero confían plenamente en que la situación mejorará en el curso de las próximas semanas. Esto no será eterno, por supuesto.

Faustino organizó las seis ferias y exposiciones ocurridas a lo largo de todo un sexenio gubernamental. Por experiencia no queda, desde luego.

Ya le informaremos.

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Y hasta aquí por hoy. Nos vamos ya. Cuídense mucho y Dios los bendiga. Ahora y siempre.

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