En política nada es casualidad, los tiempos se van determinando acorde a los proyectos personales de la clase política o de los grupos políticos en el poder, la incursión de la Doctora María Teresa Guerra Ochoa, puede interpretarse como el plan “B” del Gobernador de Sinaloa.
En días pasados la presidenta de la Junta de Coordinación Política del Congreso del Estado, en conferencia de prensa levanto la mano y expreso “levantó la mano” para dejar registro de mi interés, dejando en claro que no es momento de hacer campañas y que estoy consciente de que aún no son los tiempos, fue para que en Morena quede el registro de mi aspiración a encabezar la candidatura en las elecciones de 2027”.
En ese contexto, la Diputada ha realizado una serie de recorridos por la geografía sinaloense con la finalidad de dar a conocer las acciones realizadas por la actual legislatura, sin embargo, la función primordial es promover su figura y que el electorado sinaloense conozca su nombre a fin de poder estar en condiciones de salir beneficiada en la encuesta, que normalmente realiza morena para elegir a sus candidatos.
El activismo realizado por la Senadora Imelda Castro en los municipios del Estado, la suma de políticos morenistas a su proyecto rumbo a la candidatura por la gubernatura, la cercanía que ha mantenido con la sociedad sinaloense, debieron de haber prendido los focos amarrillos en el tercer piso, máxime cuando se percibe que en Sinaloa puede ser una mujer la que abandere la candidatura de MoReNa al gobierno, dejando fuera las aspiraciones del Senador Enrique Inzunza.
En ese tenor, el grupo en el poder opto por habilitar a la Doctora Tere Guerra, con la finalidad de estar en igualdad de condiciones cuando se decida la candidatura, habrá que reconocer que la Diputada es una persona con amplia experiencia en política, en el activismo social y conocedora del Derecho, por lo que habrá de llevar su promoción sin violentar la Ley, buscando remontar en corto tiempo.
3 PUNTO CERO. – Ante el activismo emprendido por las morenistas María Teresa Guerra e Imelda Castro, pronto observaremos los reacomodos de los grupos al interior del partido en el poder, ambas se encuentran en el ocaso del sueño de ser la primera Gobernadora de Sinaloa.