columna jorge luis telles circular

= De entre siete o hasta ocho candidatos apuntados

 

= Empate técnico, según la encuesta de Arias

 

= Los restantes no pintan en las intenciones de voto

 

= Viernes 05, fecha para los nuevos municipios

 

Tras la declinación de Héctor Melesio Cuen Ojeda en beneficio de Rubén Rocha Moya, la pelea por la gubernatura del Estado se redujo (de un total de siete apuntados en primera instancia) a solo dos contendientes:

Uno de ellos, el propio Rocha, ahora en candidatura común MoReNa-PAS.

El otro, Mario Zamora Gastelum, de la coalición PRI-PAN-PRD.

Con Cuen, como candidato del Partido Sinaloense, se comenzaba a dibujar un posible escenario de una elección de tercios en la lucha por el Poder Ejecutivo Estatal; sin embargo, tras su decisión, ahora solo se ven dos protagonistas sobre el ring.

Por ahí, en la misma ruta, Sergio Torres Félix, de Movimiento Ciudadano, intenta todos los días (en especial los martes, cuando se reúne con los representantes de los medios de comunicación) ponerle música a una fiesta por ahora desangelada -quizás por las restricciones que impone la Ley Estatal Electoral, además de la pandemia-; pero Sergio, lamentablemente, no llegará muy lejos en sus intenciones. Como dice el compañero y amigo, José Luis López Duarte, “mucho candidato, para tan poco partido”.

A nivel personal siempre sostuvimos, aquí y en los diferentes espacios periodísticos a los que comparecemos en calidad de invitados, que ningún partido podría ganar en solitario las elecciones de junio venidero. Más que eso: que era un suicidio ir solos a la jornada comicial.

Así lo entendió hasta MoReNa, a pesar de encabezar, por ahora, las intenciones de voto y eso explica la apertura de sus puertas al PAS, con quien contendrá bajo el esquema de candidaturas comunes. Y así lo comprendió también el Partido Sinaloense, cuando su líder estatal, Héctor Melecio Cuen Ojeda, admitió que sus cuentas no correspondían a la realidad política de la entidad.

En el caso de Sergio Torres va solo con Movimiento Ciudadano y eso es dar un paso inevitable hacia el desfiladero. Todavía hay tiempo para cambiar de opinión; pero no lo vemos factible, la verdad.

Rosa Elena Millán Bueno, como candidata gubernamental del Partido Fuerza por México, también hará ruido a lo largo de una campaña que arrancará el ya muy cercano 4 de abril; sin embargo, sus expectativas tampoco son favorables. A Rosa Elena – como a Sergio – le pegará su defección del Partido Revolucionario Institucional, independientemente de la nula estructura de este partido de nueva creación, que por ley (a propósito) tiene que competir solo, sin alianzas de ninguna índole con nada ni con nadie.

Lucila Ayala de Moreschi (Redes Sociales), Gloria González Burboa (PT) y Tomás Saucedo Carreño (PVEM) son buenas personas, excelentes ciudadanos y profesionistas reconocidos; pero, por ahora, las condiciones no les son favorables para aspirar tan siquiera a un 3 por ciento de la votación total, que es el objetivo de los llamados partidos pequeños y no se diga aquellos de nueva creación. Harán su mejor esfuerzo. Que no quepa duda.

Y todavía falta un candidato o candidata, por el Partido Encuentro Solidario, cuyo nombre se dará a conocer en el curso de los próximos días, sin posibilidad alguna de estremecer el andamiaje político de Sinaloa, ni mucho menos.

Así las cosas, ratificamos que la lucha por la gubernatura de nuestro Estado está reducida a solo dos gladiadores: Mario Zamora y Rubén Rocha Moya; Rubén Rocha Moya y Mario Zamora.

Hagan sus apuestas señores míos.

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Y bien.

El resultado de la última encuesta elaborada por Arias Consultores – cerrada el 27 de febrero próximo pasado – confirma nuestro análisis, que no es nada del otro mundo y que reúne sobradamente los factores de la obviedad.

Efectivamente, según este levantamiento, Rubén Rocha Moya encabeza la intención de voto, con un 38. 8 por ciento de las preferencias, con poco menos de 3 puntos porcentuales de ventaja sobre Mario Zamora, que cuenta con el 36 por ciento, elementos que convergen en la definición de “empate técnico” para las compañías encuestadoras.

Héctor Melesio Cuen tiene un 8 por ciento en esa encuesta; Sergio Torres, un 3. 6; Gloria González, un 1. 6; Lucy Ayala, un uno por ciento y Tomás Saucedo Carreño, el 0. 2 por ciento.

Ciertamente, todavía hay factores a considerar como lo es la citada declinación de Héctor Melesio Cuen Ojeda en favor de Rocha; la irrupción de Rosa Elena Millán y la aparición de un octavo candidato o candidata (para pulverizar más el voto todavía); sin embargo ya las tendencias están marcadas y difícilmente cambiarán de aquí a la fecha de la elección.

Por lo pronto, un empate técnico entre Zamora y Rocha.

Habrá que seguir otras encuestas, mismas que aparecerán por montones en las próximas semanas y más a lo largo de los meses de abril y mayo; los de campaña.

Pendientes pues.

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Mientras.

Ayer, en la ciudad de México, el Senado de la República recibió, procesó y aprobó las solicitudes de licencia de dos de los representantes de Sinaloa ante la cámara alta del Congreso de la Unión y anticipó que a la brevedad citará a sus suplentes para la toma de protesta correspondiente.

Uno de ellos es Heriberto Galindo, suplente de Mario Zamora.

El otro, Raúl de Jesús Elenes Angulo, de Rocha Moya.

Galindo asumirá funciones como senador de la República el jueves 04 del presente; Elenes Angulo, el viernes 05. Y entrarán en acción, prácticamente de inmediato.

Heriberto Galindo, como sabemos todos, cuenta con una hoja de servicio público sencillamente impresionante; pero, por situaciones políticas y cosas del destino, estaba en el banquillo, en espera de una nueva oportunidad. Ya se dio y si de algo estamos seguros es que le pondrá alma, corazón y vida a su desempeño.

Que tenga éxito.

Elenes Angulo, a su vez, se desempeñaba como director general de la Comisión Nacional de Pesca, que tiene su sede en el puerto de Mazatlán. La senaduría representará un cambio radical en estilo y perfil; pero se trata, hay que decirlo, de uno de los cargos más honrosos y representativos en la política mexicana, así que, del mismo modo, la mejor de las suertes.

En cuanto a Mario Zamora y Rubén Rocha Moya, justo es puntualizar que tuvieron una emotiva despedida, desde el edificio de la cámara alta del Congreso de la Unión. Senadores de todas las fracciones ponderaron su actuación; hicieron votos por una contienda de altura y se multiplicaron, en suma, los buenos deseos, tanto para el uno como para el otro. Y hay que decirlo: excelente su desempeño en poco más de dos años de ejercicio legislativo.

Suyos los comentarios, amigo lector.

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Por otro lado.

Sesión pública extraordinaria de la sexagésima tercera legislatura del Congreso del Estado para el próximo viernes, bajo el siguiente orden del día:

-Segunda lectura y discusión de dictamen sobre municipalización de Eldorado.

-Segunda lectura y discusión de dictamen sobre municipalización de Juan José Ríos.

-Discusión de dictamen que propone reformar la Constitución Política del Estado, artículo 18, fracción I y artículo 112, párrafo tercero, fracción III, para crear los municipios de Eldorado y Juán José Ríos.

-Toma de protesta del titular de la Unidad Técnica de Evaluación.

-Solicitud de licencia de diputadas y diputados integrantes de la actual legislatura.

Y:

-Toma de protesta a nuevos diputados.

El programa sueno atractivo ¿no? Y espéreme tantito: habrá noticias.

Pendientes.

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En otro tenor.

En su acostumbrado convivio del martes con los reporteros de las fuentes políticas, Sergio Torres Félix, el candidato gubernamental de Movimiento Ciudadano, volvió a arremeter con fuerza, ahora contra Rubén Rocha Moya y Héctor Melesio Cuen Ojeda, protagonistas estelares de una nueva alianza política, bajo el modelo de candidaturas comunes.

-Hay sumas que restan – dijo Sergio, de entrada.

Y sentenció:

-Rocha y su partido están hundiendo su propio barco, porque estas alianzas maquiavélicas van por un lado y por otro, las preferencias de la gente; pero no van a poder con el poder de la sociedad.

También le pegó al PRI, en el entendido de que la desbandada de militantes es irrefrenable. Puso, como ejemplo, a quienes se fueron al Partido Fuerza por México, al que calificó como “un partido satélite de MoReNa y al servicio de Andrés Manuel López Obrador.

O sea: no deja títere con cabeza, martes tras martes.

Es su papel. ¿No?

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A manera de colofón.

Hasta aquí por hoy. Ya nos vamos con nuestros deseos de siempre: que Dios los bendiga.

Y nuestra recomendación: cuídese mucho, ahora más que nunca.

(El relajamiento en nuestra ciudad capital llega a niveles inconcebibles y preocupantes. Ahí está la estadística que noche a noche da a conocer la secretaría estatal de salud: contagios a la alza en los últimos días y una cuota de muertos de hasta quince por día. Si las cosas siguen así no falta mucho para que nos regresen a semáforo rojo. Y la culpa no es del gobierno. Es nuestra y de nadie más.)